Qué hacer si se detectan bultos extraños en los perros

Home / Farmacia Veterinaria San Bernardo / Qué hacer si se detectan bultos extraños en los perros


De vez en cuando se llegan a detectar bultos en diferentes áreas corporales del perro y con variadas características. Tales bultos pueden tener tamaños distintos, causas de aparición y niveles de riesgo. Es necesario conocer lo mejor posible acerca de los bultos en los perros para saber qué origen pueden tener, además de aprender a detectarlos ya sea palpándolos o a través de la simple observación.

Es necesario que en cuanto se detecte un bulto extraño en el cuerpo del perro, aun cuando solo sea de pequeño tamaño, se consulte de inmediato con el veterinario. Únicamente este especialista puede reconocer cuál es su origen y determinar el tratamiento que se debe seguir llegado el caso.

Cuáles son los distintos tipos de bultos en los perros

Lo más importante es conocer los distintos tipos de bultos que hay en los perros. En los cuerpos de los canes eventualmente aparecen bultos muy distintos. Si al acariciar al perro se detecta uno de estos bultos es indispensable atender sus principales detalles. Por ejemplo, algunos de esos bultos se mueven, otros tienen un tamaño grande, algunos más tienen un tamaño pequeño, la consistencia de ciertos bultos puede ser su principal distintivo, etc. También hay que atender si el bulto está acompañado de úlceras y la rapidez con la cual ha crecido.

Necesidad de atención veterinaria para atender bultos corporales en los perros

Posteriormente, los datos y referencias mencionadas hay que comunicárselas al veterinario y llevar al perro para que sea examinado. En caso de que la condición del perro sea grave, el tratamiento que determine el veterinario, si se aplica en tiempo y forma, puede propiciar la sanación plena del can. Aunado a lo anterior, siempre será más económico y fácil ofrecerle apoyo veterinario al perro, antes de que se agrave su condición y se ponga en riesgo su vida.

Ciertos bultos en los perros son meras acumulaciones de grasa. Son los más comunes de hallar en el cuerpo de nuestra mascota. No obstante, también es factible encontrar bultos duros, los cuales podrían apuntar a quistes. Ambos tipos de bulto son sencillos de detectar y no implican un riesgo considerable para el perro.

Causas que propician la aparición de bultos corporales en los perros

Es el veterinario quien puede identificar el origen de un bulto. Sólo este especialista tiene la capacidad de evaluarlo y decidir si es inofensivo o si está relacionado con el cáncer. En ciertos casos se debe realizar una biopsia, es decir, extraer por completo el bulto para que sea analizado en el laboratorio y se logren identificar sus principales características.

No cabe duda de que la aparición de bultos en el perro causa una gran preocupación en los propietarios de esas mascotas por su posibilidad de estar relacionados con el cáncer. Los bultos suelen aparecer por acumulaciones de células benignas o células malignas. La aparición del cáncer en los perros suele estar vinculado con tendencias genéticas, condicione del medioambiente y circunstancias hormonales.

Tumores y bultos en el cuerpo del perro

Cuando se presentan tumores de mama con frecuencia están relacionados con las hormonas y los ciclos reproductivos de las perras. En caso de que se detecte algún bulto en el área ventral del perro también puede estar relacionado con algún tumor que haya aparecido en cierto órgano corporal del perro.

Otras posibles causas por las cuales aparecen tumores en los perros son por la aplicación de vacunas, por agrandamiento de los ganglios linfáticos y por mordeduras que se infectan y que derivan en accesos.

Posibles tratamientos para atender a los bultos en los perros

Los tratamientos para atender los bultos en los perros dependen en su aplicación del origen que tengan. Por ejemplo, si la causa de cierto bulto es un absceso es preciso drenarlo por completo, posteriormente desinfectarlo y luego aplicar medicamentos antiinflamatorios y antibióticos. Es preciso tener precaución con los abscesos que aparecen en el cuello y la cabeza del perro, ya que requieren de atenciones urgentes.

En cambio, los bultos que llegan a aparecer en el perro tras haberles aplicado inyecciones suelen desaparecer por su propia cuenta. Lo mismo sucede en el caso de los abscesos, lo cual contrasta con ciertos bultos que, por su nivel de benignidad y ubicación en el cuerpo del can no precisan de tratamiento alguno. En estos casos, solamente si aumentan su tamaño o si llegan a molestar al animal, deben ser extraídos por el veterinario.

Tags: , ,