Cuando un can presenta vómito de color negro o de tonalidad marrón oscurecido, eso es un indicio de que se encuentra vomitando sangre. A lo anterior se le conoce como hematemesis, condición que causa una gran alarma entre las personas que atienden a estas mascotas. En general se perfila como el indicio de un severo riesgo para la salud del perro.
Las causas principales del vómito negro en los perros se relacionan con úlceras o erosiones en el conducto gastrointestinal. También puede estar vinculado con la utilización de medicamentos como la dexametasona y diferentes fármacos antiinflamatorios no esteroideos.
Otras posibles causas del vómito negro en los canes son ciertas enfermedades del pancreas, pulmón, hígado y riñones.
Cómo se presenta el vómito negro en los perros
Los factores que producen el vómito negro en el can, es decir, las circunstancias que propician la hematemesis, pueden ser muy variadas, si bien, por lo general apuntan a que se han presentado daños en el conducto gastrointestinal.
De manera más específica, si lo que vomita el perro es sangre de tonalidad rojiza, lo más seguro es que el problema se derive de alguna complicación en el tubo digestivo, en el esófago o incluso en el estómago.
Si el vómito del can es de tonalidad marrón oscuro, eso apunta a que la sangre se encuentre ya un poco digerida o que sea más vieja. En cierto modo tiene la apariencia de abundantes granos de café muy oscuro.
Causas principales del vómito negro en los canes
Una de las principales causas del vómito negro en el perro es la erosión del conducto gastrointestinal, o la presencia de úlceras en esa parte del cuerpo. También debemos mencionar como causas del problema la aparición de tumores, la ingestión de algún hueso, enfermedades hepáticas, pitosis, enfermedades renales, hipoadrenocortcismo y el uso de fármacos como los glucocorticoides.
En este rubro también debemos mencionar el síndrome diarreico hemorrágico agudo, variadas intoxicaciones y casos de intensa gastritis.
Principales síntomas de hematemesis en los canes
Aunado al vómito de oscura tonalidad, un can con esta problemática puede presentar también otros indicios clínicos como deshidratación. Dolores abdominales, heces de negruzco color, anemia, letargia y anorexia.
Ahora bien, dependiendo de la enfermedad que haya causado el problema, síntomas que pueden presentarse de modo simultáneo con la hematemesis son, por ejemplo, perdida de peso y una gran debilidad cuando hay tumores, diarrea con sangre, hemorragias y sangrados en los casos de trombocitopenia, agudos dolores abdominales y problemáticas en los pulmones si hay patología en esa parte del cuerpo, etc.
Cómo se diagnostica el vómito negro en los perros
Por el hecho de que el vómito negro puede ser causado por distintas patologías en el interior o en el exterior del intestino del can, el veterinario, para obtener el mejor diagnóstico posible, deberá ir descartando distintas patologías iniciando por lo más sencillo, como, por ejemplo, las analíticas, como también el empleo de técnicas de imagen o endoscópicas.
En este grupo de procedimientos para el diagnóstico del vómito negro en el perro también hay que mencionar, el análisis de heces y de orina, el conteo de plaquetas, las ecografías, las radiografías y la búsqueda de indicios de intoxicación.
Cuál es el tratamiento del vómito negro en los canes
Para el diagnóstico del vómito negro en los canes también es provechoso usar la técnica de la endoscopia de la traquea. El tratamiento que corresponde a cada caso será determinado por el veterinario.
En este sentido, para lograr el tratamiento más efectivo es preciso que el especialista determine la concentración de proteínas totales y el hematocrito. Con ello, ese veterinario tendrá la mejor vía para evaluar el riesgo de shock hipovolémico y si es precisa alguna transfusión sanguínea.
También suele aplicarse un tratamiento de tipo sintomático que incluye fluidoterapia, para la rehidratación del can, estimulantes del apetito, antiácidos y fármacos antieméticos.
Si el veterinario identifica alguna enfermedad de tipo renal, pancréatica o hepática, es preciso llevar a cabo un determinado tratamiento específico para cada patología.
En los casos en los que el problema esté relacionado con tumores, entonces es muy posible que el tratamiento para curar la hematemesis precise de intervenciones quirúrgicas para atender las afectaciones internas.